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Una sucesi�n de notas se presentaban ante �l, como peque�as deidades al servicio de un Dios, musicalmente, todo poderoso. Danzaban a su alrededor, se deten�an, lo reverenciaban, todas las notas estaban a su disposici�n, lo �nico que ten�a que hacer era tomarlas, pero cuando intentaba hacerlo �stas se desdoblaban ante sus ojos, maravillados por la belleza de los movimientos musicales. Una idea fue tomando forma en su cabeza, una nota, tocada de dos maneras diferente sonaban casi igual pero hab�a una diferencia perceptible� una nota, de dos maneras diferentes�. Intentaba comprender �sto, darle un sentido pero todav�a no era el momento. Una mano en su hombro lo despert�, mir� a su alrededor como sin saber en d�nde estaba, quer�a recordar un extra�o sue�o que recien hab�a tenido, un sue�o con notas musicales� pero todo se esfum�, pues en ese instante alguien le preguntaba si quer�a grabar con Sony Rollins. John Coltrane accedi� gustoso y ese 24 de mayo de 1956 grab� lo que ser�a la pieza que di� el t�tulo al LP "Tenor madness".
Nacimiento El sastre caminaba nervioso por la sala de espera, yo lo v�, yo estaba ah� y quien lo niegue esta mintiendo. En su cabeza tarareaba una melod�a mucho tiempo atr�s aprendida, iba de un lado a otro, tal vez en el fondo de su alma, este sastre de Carolina del Norte sab�a que ese 23 de septiembre de 1926, de alguna manera, cambiar�a la historia de la m�sica, ese d�a nac�a su primer hijo y su nombre ser�a John William Coltrane. |
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Esa noche decid� seguirlo, caminaba err�ticamente, entraba a salones de baile, aquellos, donde uno pod�a escuchar a las grandes bandas. Pero no se quedaba mas que unos instantes, y cuando salia, su cara estaba transformada por el asco. Finalmente entro en un edificio abandonado, la m�sica me invadi� y me transmiti� una sensaci�n completamente nueva, en ese momento, comprend� cual era su b�squeda y su queja se hacia palabras en su m�sica. Ese d�a Charlie Parker dio un paso hacia el jazz moderno. |
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Tom Harrell |
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Cualquiera que lo haya visto tocar, me entenderia...no es una presencia comun...no solo por la forma en que le arranca notas a su trompeta y es mas que aspecto fisico... Creo que cambia la atmosfera a su alrededor, un figura difusa, una sileta recortada sobre un escenario, inmovil, con su trompeta en la mano, cabizbajo, la mirada perdida. Da algunos pasos al frente y una explosion de musica estalla a su alrededor, su cuerpo se contorsiona con movimientos eclecticos. Cualquiera que lo haya visto me entenderia, a quien no lo haya visto o solo escucho su musica, basta con que les diga...que Tom Harrell sufria de esquizofrenia. |
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Se sento en su sillon favorito y encendio el televisor, una risa sincera surgio de su interior y comenzo a jugar, a hacer musica con su risa que se transformo en una carcajada profunda, prolongada, interminable, que comenzo a abarcarlo todo, que no lo dejaba respirar, que aceleraba su corazon... El 12 de marzo de 1955 sentado frente a su televisor Charlie Parker, murio de risa... |
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Fot�grafo Ciego (Evgen Bavcar) |
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En 1969, fui, por cuestiones de negocios, a Par�s y cuando dispon�a de alg�n tiempo libre, sal�a a recorrer las calles de esta ciudad milenaria. En uno de estos paseos, me tope con un extra�o personaje que, con una linterna en la mano y anteojos negros, palpaba un �rbol en una noche oscura, cerrada, húmeda y opresiva. Me sent�a en el medioevo, pero algo se saco de mi enso�aci�n, pues, con paso lento e inseguro, se dirig�a hacia mi con una c�mara fotogr�fica en la mano, al acercarse se quito los anteojos y pude ver, espantado, que en vez de ojos, sus cuencas estaban vac�as. |
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Bud Powell |
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He tocado este tema miles de veces, y sin embargo, no le he podido hacer dos veces igual... He muerto miles de veces, con cada nota, con cada cancion... si solo pudiera... Una jeringa cayo al piso y quedo tendido en la cama y mientras viaja, Bud Powell, escuchaba esto...
Un Trago Hab�a tomado mucho y todo a mi alrededor comenzaba a dar vueltas, decid� que era el momento de irme, pues sent�a los efectos de la cirrosis en mi cuerpo, llame al mozo y ped� la cuenta. Un joven se subi� al peque�o escenario, se sent� al piano y empez� a tocar... cuando llego el mozo, le pregunte el nombre de este talentoso muchacho -Bud Powell, me dijo -Mozo, otro whiskey |
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Chet Baker |
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La escena parec�a extra�da del infierno, no sabr�a decir con precisi�n cuantos eran, simplemente vi que se acercaron y empezaron a pegarle, con furia inusitada. Un miedo sobrenatural se apodero de mi, cuando su cabeza dio contra el suelo y empez� a recibir las patas... Los tipos salieron corriendo y en el piso, tirado, con la mand�bula destrozada, estaba Chet Baker.
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Como un boxeador, adelanto su cuerpo; el polic�a, asombrado, trastabillo y dio su espalda contra el fr�o pavimento. se acerco, para ayudar, pero era tarde, otro hombre, tambi�n de azul, llego hasta �l y descaro un golpe, violento, certero, en su cabeza... Tez negra, traje blanco, sangre roja, una trompeta brilla en su mano, despu�s de aquel hecho Miles Davies, ya no seria el mismo. |
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El humo llena mis pulmones, siento la asfixia que se apodera de m�, lentamente. Las l�grimas no me permiten ver claramente y no se si lloro por el humo o por lo que veo. Se despliega ante mis ojos una escena horrorosamente irreal, los cuerpos...achicharrados, retorcidos en formas imposibles, calcinados... El olor es dulce y repugnante. El fuego, pens�, lo puede todo. No creo que quede nadie. C�mo empez� todo esto? |
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El tiempo...La sensaci�n de lo transcurrido, antes y ahora...Dej�moslo de lado... Rocky Mount, Carolina del Norte, una mujer est� a punto de dar a luz. Grita, reza y agradece... Su hijo nace. Llora, grita, se retuerce... En la mirada del ni�o...se advierte algo diferente... El 10 de octubre de 1917 nace Thelonious Monk El habitante de dos mundos. |
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Y contra su fuego, respondimos con sangre; la nuestra, que cubr�a el adoqu�n como un r�o desbordado... Y contra su fuego, respondimos con muerte; la nuestra, y nuestros cuerpos, sin vida, cubr�an la calle, como carne brotada de la tierra. 1 de mayo de 1886 D�a del Trabajador |
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Y el fuego sagrado dio paso al horror y fue, en ese momento, el triunfo del mal. Y cayeron piedras y aplastaron nuestras cabezas y fue el triunfo del mal. Y el ruido quiso que nuestros o�dos sangraran y el fuego se alimento con nuestra sangre y nuestros hijos... y fue el triunfo del mal. Y quiso Dios que esto pasara y pas� y �se... fue el triunfo del mal. |
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home | ||
Warne Marsh | ||
Desde la primera nota supe que ser�a un recital extraordinario, en el sentido m�s estricto de la palabra. Se pod�a respirar su m�sica, te envolv�a, te sacud�a, te dominaba� Su figura dibujaba contraluces en el escenario, dej�ndose llevar por su propia interpretaci�n. La m�sica ascendia y era como un canto divino, como un reclamo a los cielos, como un pedido de ayuda� Era una imporvisaci�n digna de Dios, tan digna del magn�nimo, que Lo quiso s�lo para El y se Lo llev�. Fue un recital extra-ordinario, s� y tuvo un final extra-ordinario� Warne Marsh muri� jugando con las notas, jugando con Dios, en medio del recital, frente a todos nosotros�. |
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home | ||
Muerte | ||
Y casi sin darse cuenta, me abrió sus puertas y se convertiste en artífice de su propia muerte, pues hoy, más que nunca, soy vocero de la ira. Traigo conmigo angustia y destrucción. Tengo la fuerza de la muerte sin sentido, dejo a mi paso el negro camino del desconsuelo. Una figura se forma detrás suyo y sólo le resta el tiempo que tarde en leer estas lineas, pues soy el mensajero del fin. | ||
Andres Zaied
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